La fortaleza cuenta con una planta poligonal, con cuatro torres, un patio de armas y otras dependencias. Está rodeada de un profundo foso, conservándose las almenas en punta de diamante en la Torre del Homenaje y en el paseo de uno de los muros. Ateniéndose a las características de sus paredes se calcula que esta edificación tiene su origen en los últimos años del siglo XII o principios del XIII. Su historia está vinculada a la familia de los Moscoso de Altamira.
Esta fortaleza acoge cada verano, y durante los fines de semana de todo el año, un exposición de artesanía en vivo.