La Playa de Barda, situada en una apacible ensenada rodeada de montañas, ofrece a los visitantes un refugio tranquilo y poco concurrido. Es conocida por su arena blanca y fina, su oleaje moderado y su entorno natural que incluye toxos y xestas en flor durante la primavera, creando un paisaje vibrante y colorido. Aunque carece de servicio de socorristas debido a su ubicación en mar abierto, la playa proporciona sombra bajo los árboles cercanos y acceso a agua fresca a través de un pequeño regato canalizado en las casetas.
Los visitantes pueden explorar la costa cercana hacia la aldea de O Roncudo, aprovechando tanto rutas costeras desafiantes como opciones más accesibles a través de pistas de tierra entre los aerogeneradores locales. La Playa de Barda invita a descubrir la serenidad y la belleza natural de la Costa da Morte sin igual.