Saber más sobre Ermita de la Virgen del Monte en Camariñas
En lo alto del promontorio que abraza la villa, la Ermita de la Virgen del Monte en Camariñas aparece como una atalaya sencilla y luminosa. Su silueta barroca del XVIII —fachada sobria y una sola espadaña— enmarca un mirador natural con vistas a la ría, a Muxía, a Camariñas y al océano abierto. Aquí el viento trae sal y campanas.
Para los camariñáns es una casa de amparo: antes de salir a faenar, muchos marineros se encomiendan a la Virgen del Monte. El día grande llega el Lunes de Pentecostés, con misas desde primera hora y la romería que antaño fue la más importante de Camariñas: familias enteras pasaban la jornada en el Monte Farelo y comían allí mismo tras la celebración, una costumbre que hoy se intenta recuperar.
La devoción se ve y se toca: exvotos de barcos, velas encendidas y, a unos metros bajo la fachada, la roca donde la tradición señala las “huellas” de la Virgen. Ven sin prisa: atardecer, horizonte inmenso y esa calma que explica por sí sola la Ermita de la Virgen del Monte en Camariñas.
Acceso: desde Camariñas, toma la carretera hacia Cabo y Faro Vilán; a 1,2 km, desvío a la izquierda señalado hacia el campo de fútbol y la ermita “Virxe do Monte”.