El dolmen que llegó volando
El nombre Pedra Moura evoca la existencia de leyendas de seres fantásticos en este dolmen. En concreto, los mayores cuentan que sus piedras fueron transportadas por una moura desde el Petón de Calvelo mientras hilaba con una rueca y amamantaba a un niño.
Situado en un prado, es un megalito monumental, aunque bastante alterado. Por ejemplo, no quedan evidencias del túmulo de tierra que originalmente lo cubría, probablemente debido al continuo trabajo agrícola, pero las siete losas verticales que conserva todavía muestran su gran tamaño.
También tiene la particularidad de no tener aparentemente corredor de entrada, como ocurre con la mayoría de los dólmenes conocidos de la Costa da Morte. Si no que cuenta tan solo con una cámara poligonal.